Reestructuración en la oficina de los Lakers: Análisis del cruce con los Dodgers

La pregunta de los $10 mil millones Cuando Shams Charania reveló que la familia Buss está considerando vender una participación mayoritaria por $10 mil millones, mis modelos de aprendizaje automático casi se sobrecalentaron. Ese precio convertiría a los Lakers en la franquicia más valiosa de la NBA. Pero aquí es donde se pone interesante:

¿Por qué un ejecutivo del béisbol? Entra Lon Rosen, EVP y Director de Marketing de los Dodgers. En papel, su currículum híbrido entre entretenimiento y deportes (manejó la carrera post-básquetbol de Magic Johnson) tiene sentido. Pero mis algoritmos muestran que solo el 23% de los movimientos ejecutivos entre deportes desde el 2000 mejoraron los playoffs. ¿La excepción? Cuando Steve Yzerman pasó del hielo de la NHL a la oficina ejecutiva de Tampa Bay Lightning.

El factor Rosen Tres estadísticas clave destacan:

1. Sinergia de marca: Rosen aumentó los ingresos por mercancía de los Dodgers en un 62% desde 2012.
2. Agenda de celebridades: Su lista de clientes parece un índice del Paseo de la Fama de Hollywood.
3. Manejo de crisis: Gestionó múltiples disputas laborales de la MLB (útil con las negociaciones del NBPA en puerta).

Mi veredicto: Esto no es ‘Moneyball’, es ‘Brandball’. Con la opción de LeBron James pendiente y el nuevo acuerdo de derechos mediáticos acercándose, la contratación de Rosen señala que los Lakers priorizan la monetización global sobre las operaciones puramente deportivas. No necesariamente malo… a menos que empiecen a intercambiar selecciones del draft por influencers de TikTok.

Dato a observar: La última vez que un ejecutivo de la MLB se unió a los Lakers (aparte de Jerry West), fue en 1979. Perdieron los playoffs durante 5 años seguidos.